viernes, 29 de febrero de 2008

Tengo Sed.



Un día una amiga decidió visitarme, era la primera vez que iría y al parecer no había copiado bien la dirección de mi casa, así que estuvo más de una hora perdida, entre calles, veredas, subía cuestas, las bajaba, hasta que al fin llegó.

Muy extenuada, por su intenso esfuerzo por llegar, solo dijo algo al verme, "tengo sed, necesito agua". Le serví un vaso de agua y ella lo tomó con tanta pasión, deseo, se deleitó en ese vaso de agua, era como si ese vaso era lo más importante para su vida en ese momento.
Recuerdo que yo estaba muy tranquila en casa sentada leyendo un libro esperando la llegada de mi amiga y no tenía sed, y menos deseo de tomar agua, pero sucedió que al verla a ella, de repente tuve tanta sed y me provocó tomar agua; al final ambas nos tomamos 3 vasos de agua
Ella porque realmente tenía sed y yo porque fui provocada por la manera tan apasionante conque mi amiga tomaba.

"Oh Dios, tú eres mi Dios; yo te busco intensamente. Mi alma tiene sed de ti; todo mi ser te anhela, cual tierra seca, extenuada y sedienta" Salmo 63:1"

"Muchas veces estamos tan cómodos en la vida, conocemos a Dios, pero no tenemos sed de Dios. Tener sed de Dios es mucho más que una frase, o una canción.

A menos de que llegue un momento en tu vida que estés extenuado, cansado de siempre cometer los mismos errores, seco, o ya no puedes más con tus problemas, con la situación que vives, y decides buscar una salida, un milagro, y comienzas con intensidad a buscar algo que sacie tu sed.

A veces vamos a fuentes equivocadas y saciamos la sed de nuestra alma con amigos, bebidas, drogas, comidas, fiestas, películas; son bebidas de efecto temporal, he allí la razón por la que a veces no tenemos sed de Dios, nos la pasamos tomando de todo y quedando más secos, pero Jesús dice: "vengan a mí, los que tengan sed, y serán saciados"

Si estás cansado, seco, extenuado con tu vida, llegaste al mejor punto, no te queda otra que ir a la fuente de agua de vida: "Jesús", es la única agua que sacia tu ser, pero se debe buscar con intensidad, con anhelo, con deseo, con pasión, como lo más importante para la vida, así como buscas un vaso de agua cuando llegas de hacer ejercicios, o en un día de mucho calor, y gritas, “TENGO SED; NECESITO AGUA".

Te aseguro que muchos verán la manera en que tu tomas de Dios y ellos te pedirán lo mismo para beber, los provocarás . Así como tú busques la presencia de Dios, los que te miren, lo harán. Así como tú bebas de la fuente, otros beberán. Así como le adoras, otros adorarán. ¿Tienes sed ahora? Pídele de beber a Dios, nunca te dará solo un vaso de agua, te saciará.




Salmos 139

Es algo reconfortante saber que tenemos a un Dios que está sobre nosotros,
El Alto y Sublime, que conoce todo en nosotros....lo pensamientos y las intenciones de nuestro co
razón.

" Señor, tú me examinas,
tú me conoces.... Sabes cuándo me siento y cuándo me levanto;
aun a la distancia me lees el pensamiento.
Mis trajines y descansos los conoces;
todos mis caminos te son familiares."


A veces pensamos que lo que hay en nuestra mente sin ser expresado aún ....
nadie lo puede saber...podemos odiar a alguien y al mismo tiempo sonreirle ,
total , nadie lo sabe ...pero mira .....eh ....alguien ya lo supo:

"No me llega aún la palabra a la lengua
cuando tú, Señor, ya la sabes toda."


Para los que confían en El , hay un bello consuelo:


"Tu protección me envuelve por completo;
me cubres con la palma de tu mano.
Conocimiento tan maravilloso rebasa mi comprensión;
tan sublime es que no puedo entenderlo."


De nuevo , no hay sitio donde escondernos de su vista:

"¿A dónde podría alejarme de tu Espíritu?
¿A dónde podría huir de tu presencia?
Si subiera al cielo,
allí estás tú;
si tendiera mi lecho en el fondo del abismo,
también estás allí.
Si me elevara sobre las alas del alba,
o me estableciera en los extremos del mar,
aun allí tu mano me guiaría,
¡me sostendría tu mano derecha!
Y si dijera: «Que me oculten las tinieblas;
que la luz se haga noche en torno mío»,
ni las tinieblas serían oscuras para ti,
y aun la noche sería clara como el día.
¡Lo mismo son para ti las tinieblas que la luz!"


El nos conoció a ti y a mi aún antes de que nacieramos :

"Tú creaste mis entrañas;
me formaste en el vientre de mi madre.
¡Te alabo porque soy una creación admirable!
¡Tus obras son maravillosas,
y esto lo sé muy bien!
Mis huesos no te fueron desconocidos
cuando en lo más recóndito era yo formado,
cuando en lo más profundo de la tierra
era yo entretejido.
Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación:
todo estaba ya escrito en tu libro;
todos mis días se estaban diseñando,
aunque no existía uno solo de ellos."

Son a veces incomprensibles para nuestra mente
las obras de nuestro Señor :

"¡Cuán preciosos, oh Dios, me son tus pensamientos!
¡Cuán inmensa es la suma de ellos!
Si me propusiera contarlos,
sumarían más que los granos de arena.
Y si terminara de hacerlo, aún estaría a tu lado
Oh Dios, ¡si les quitaras la vida a los impíos!
¡Si de mí se apartara la gente sanguinaria,
esos que con malicia te difaman
y que en vano se rebelan contra ti!
¿Acaso no aborrezco, Señor, a los que te odian,
y abomino a los que te rechazan?
El odio que les tengo es un odio implacable;
los cuento entre mis enemigos!"


Es tanta la necesidad de dejarnos examinar por El , por que a juicio nuestro
todo puede ir bien ...pero hay unas palabras que dicen que la justicia nuestra son como
trapos de inmundicia .....por lo tanto algo que podemos tener por bueno...realmente
puede no serlo y e ahí la importancia de dejar que El nos alumbre, nos examine y nos limpie ..

"Examíname, oh Dios, y sondea mi corazón;
ponme a prueba y sondea mis pensamientos.
Fíjate si voy por mal camino,
y guíame por el camino eterno."